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Certera Visión Actual sobre la Oposición.

Por Pedro Vargas Avalos.

La oposición política viene a ser el conjunto de personas y organismos, entre los que destacan los partidos políticos, así como las estructuras sociales y los individuos que la apoyen, total o parcialmente. En nuestra república es evidente que el partido en el poder (MORENA) y los institutos partidistas aliados (PT, PVEM, etc.,) así como en general los simpatizadores del lopezobradorismo, integran lo que se conoce como la Cuarta Transformación (Cuatro T). Todo ente opuesto a este movimiento, es identificado como la oposición.

El forcejeo entre gobierno y adversarios, o sea, la oposición, en cualquiera democracia está a flor de los labios un día sí y otro también. Sin embargo, los que critican al régimen, lo hacen extremosamente y de ordinario, solo buscando o inventando defectos del gobierno y sus funcionarios, sin realizar la llamada critica propositiva, que es necesaria y muy útil. Su obsesión parece un real delirio y eso la convierte en sistemática y ofuscada detractora.

Por su lado, los seguidores del abanderado de la Cuatro T (Andrés Manuel López Obrador) en su afán por defender a su líder, también son puntillosos censuradores de la oposición, pero aseguran, como decía el destacado escritor Antonio Gala: “Los buenos gobiernos se conocen cuando lo que hacen vale más que lo que sus opositores dicen.” 

¿Como está realmente la oposición del lopezobradorismo? En la mañanera presidencial del 24 de enero, dijo el primer mandatario, que en México “todo…está cambiando y vamos avanzando”. Y como ejemplo se refirió a un punto de vista emitido el 19 de ese mes, por el afamado dizque “teacher”, Joaquín López Dóriga (JLD).

Ya sabemos que este personaje de origen ibérico, por muchos años conductor de noticieros en Televisa y cadenas de radio, ha sostenido constantes diferencias con el primer magistrado federal, sobre todo desde que este lo evidenció como usufructuario archimillonario del gobierno de Peña Nieto. Empero, manifestó AMLO la mañanera antedicha: “El otro día me gustó, ayer, antier, una editorial de Joaquín López-Dóriga. Fíjense los tiempos que estamos viviendo, no podemos quejarnos de que nos aburrimos, no; esto no se había visto nunca”.

Luego precisó el Presidente: “Es en el Twitter, en el Twitter, es una editorial en donde él habla de… dónde está la oposición… es interesante”. Enseguida advierte, que “No porque ahora esté haciendo este análisis significa que ya vamos nosotros a exaltarlo, pero sí reconocemos que hay un cambio y, repito, es de sabios cambiar de opinión”.  

En ese editorial tuitero, fechado el miércoles 19 de enero reciente, que JLD intituló “La oposición en Babia”, dice este célebre periodista sui géneris: “Y la oposición, la oposición en Babia o más allá de Babia…” Enseguida enumera sus razones por las que AMLO sigue fuerte: Hay dos factores, dos factores políticos que sostienen la fuerza del presidente López Obrador:

Uno propio, su arrastre, con la fidelidad de sus seguidores, respaldada por sus programas sociales. Y otro externo, que es la ausencia de una oposición real”.

Del primer factor, “el arrastre de López Obrador”, afirma que es simplemente el hecho contundente de que “ganó las elecciones de 2018 con el 53 por ciento de los votos, más de 30 millones de mexicanos”.

Y agrega JLD, que desde mandatario electo y luego como Presidente, AMLO “no hizo nada que no hubiera anunciado. Pero el que diga que se engañó es que se está engañando. Repito, no hizo nada que no hubiera anunciado: la cancelación del aeropuerto de Texcoco, sus obras emblemáticas, el Tren Maya, la refinería de Dos Bocas, el aeropuerto ‘Felipe Ángeles’ y su proyecto político, revocación de mandato, ofensiva contra el INE, incremento y extensión de sus programas sociales, entre otras acciones hoy de gobierno”.

Dicho lo anterior, interroga López Dóriga: “Y pregunto: ¿y dónde está la oposición? Pues lo que queda de ella debe andar en algún lugar, le decía, cercano a Babia o más allá, con sus mismas limitaciones y miserias, más ocupada en atender sus proyectos personales y de grupo que los de su militancia y su rol opositor”.

Y sigue con su pesado análisis López Dóriga: “Desde esa pequeñez la oposición quiere ahora reivindicar el resultado de las elecciones de junio pasado en la Ciudad de México, que ni ellos previeron, victoria que atribuyen a ellos, a su alianza, a los partidos y no a la capacidad decisoria de la sociedad; es decir, fueron ellos, los partidos, no los ciudadanos, los votantes, y olvidan, olvidan, en este distractor, el desastre de las elecciones estatales en las que Morena arrasó”. Se refiere a la apabullante derrota que MORENA y aliados, infligió a las oposiciones, a nivel de gubernaturas, pues de 15 se llevó 12.  

De lo anterior, parte JLD a una especie de advertencia: “Hoy, a un año y medio de lo que vendrá para 2024, la oposición permanece en su nadería y en sus intereses de siempre. El PRI, Anaya… perdón, el PAN, Anaya; el PRI, Alejandro Moreno; el PRD, el PRD a lo que digan, sí, pues no tiene nada”.

Escrito lo precedente, concluye el exteleviso: “Y en esa mar tranquila, pues en esa mar tranquila navega, en esa calma chicha, López Obrador con su diseño sucesorio y de consolidación de proyecto sin ningún obstáculo, sin ninguna ola que le inquiete o altere su ruta; es más, no sólo eso: con la oposición, con la oposición remando para él, para el presidente.”

Con cuánta jovialidad exclamó el fundador de MORENA, tras ese editorial aplastante 

de uno de sus inexcusables críticos: ¡Tómala!

Dentro de los enfrentamientos de este exponente de los medios de comunicación tradicionales y el mandatario nacional, se han registrado varios que tienen muy civilizado término. Recordamos que, en 21 julio de 2021, JLD criticó a Tatiana Cloutier por su vestimenta cuando en misión oficial, visitó Washington. Poco después se disculpó y en la mañanera correspondiente, el presidente Andrés Manuel López Obrador consideró positivo el hecho de que el periodista, se haya disculpado públicamente con la secretaria de Economía, por sus comentarios clasistas en torno a la vestimenta de la funcionaria federal: eso es muy bueno, eso habla bien de él y de todos porque todos podemos cometer errores, no somos infalibles.

En mayo 18 de 2021, durante la inauguración de la muestra “Memorial. La matanza de los chinos en Torreón (1911)” en el Museo Arocena de La Laguna (Coahuila), Alejandra Frausto, secretaria de Cultura federal, enlazó ese hecho con el actual conflicto entre Israel y Palestina, considerado “guerra fratricida”, incurrió en el gazapo de llamarla “guerra fraterna”. Rápido, JLD la calificó de “inculta”; entonces Frausto reconoció que tuvo un lapsus linguae. Luego López Dóriga, se enmendó: “Todos nos equivocamos A. Frausto. Lo importante es reconocer y aprender. Y se lo reconozco. Le mando un saludo cordial”. (Niza Rivera, Cultura, Proceso, 19 mayo 2021).

Por todo lo aquí comentado, es que apuramos lo siguiente: La oposición debe reconsiderar su postura actual de limitaciones y miserias, más ocupada en atender sus proyectos personales y de grupo que los de su militancia y su genuino rol opositor. Magister dixit.

CLERO, POLÍTICA Y LEY: LA SEPARACIÓN DE IGLESIA-ESTADO.

Por Pedro Vargas Avalos.

Un tema que parece superado, o quizás lejano por los hechos que lo caracterizaron, vuelve a reaparecer ante la opinión pública: la separación de la iglesia y el Estado. El motivo fueron los comicios para elegir munícipes en San Pedro Tlaquepaque, el año pasado, y que se anularon por el Tribunal Federal Electoral (TFE) debido a la  intervención con mensajes sobre dichos comicios, de varios eclesiásticos, destacando entre estos el cardenal emérito Juan Sandoval Íñiguez. El hecho de ser cierto, significaría una infracción al artículo 130 constitucional.

La semana pasada,(19 de enero) el aludido TFE determinó que se había acreditado esa participación, con lo que se violó el principio constitucional de separación Iglesia-Estado, por parte del cardenal  Sandoval Íñiguez y del sacerdote Mario Ángel Flores Ramos. El expediente pasa a la Secretaría de Gobernación, que es la autoridad que decidirá la sanción a imponer.

Ya sabemos que durante la colonia, el clero fue poderosísimo y estaba protegido por el reino hispano, el cual tenía un acuerdo: (Real Patronato Indiano) bajo el cual quedaba sujeto a la autorización real, la construcción de iglesias, catedrales, conventos, hospitales, la concesión de obispados, arzobispados, dignidades, beneficios y otros cargos eclesiásticos. El Papado concedió esos privilegios en atención a los esfuerzos de la monarquía hispana para ensanchar la cristiandad católica. 

Desde luego, debemos entender, que para el practicante de una religión,  obedecer sus normas y las obligaciones que se derivan de ese credo, son sustanciales y trascendentales, a tal grado, que el creyente puede  ceder su libertad, perder familia, patrimonio y hasta la vida por defender sus creencias, como sucedió en la etapa de la Cristiada.

Eso es algo que desde tiempos inmemoriales se registra. Hubo épocas llamadas teocráticas, en las cuales la religión era omnipresente y  los sacerdotes  los guías de toda actividad. Al correr de los años, ya superada la Edad Media, franja de la humanidad en que casi todo fue oscuro, pero  lo religioso brillaba intensamente, sobrevino el pensamiento ilustrado y con él arribó el Estado liberal y en algunos países, la democracia, específicamente desde finales del siglo XVIII y principios del XIX. Con ese sistema, también asomó el principio de la libertad religiosa, que sería adoptado como derecho humano esencial. La consecuencia natural de la aceptación del mencionado principio de libertad religiosa, es la separación del Estado y la Iglesia.

Entre nosotros, lograr esa separación ha sido terriblemente complejo, llegando incluso a originar conflictos armados, como la Reforma y la guerra cristera, que  dejaron huellas muy  complicadas a tal grado, que aún persisten resabios.

La Carta Máxima de Querétaro acogió el artículo 130: en este numeral se  tratan las cuestiones relacionadas con  lo relativo al principio “histórico” de la separación del Estado y la iglesia, además de otros tópicos conexos.  Las fuerzas conservadoras y tradicionalistas, no aceptaban de buen grado estos conceptos, por lo que hubo muchos forcejeos.

El presidente Plutarco Elías Calles (1924-1928) pretendió llevar a la práctica ese mandato constitucional, soslayado en parte,  y expidió las correspondientes normas reglamentarias (o sean, la Ley Reglamentaria del artículo 130 de la Constitución del 18 de enero de 1927; la Ley que Reglamenta el Séptimo Párrafo de dicho Artículo , relativo al número de sacerdotes que podrían ejercer en el Distrito y territorios federales, de 30 de diciembre de 1931 -los Estados la replicaron en sus territorios-; y la Ley que Reforma el Código Penal para el Distrito y Territorios Federales, de 21 de julio de 1926), con lo anterior, se provocó gran efervescencia religiosa  que desembocó en la guerra civil (1926-1929)  conocida como Guerra Cristera o la Cristiada. Lograda la paz de manera peculiar, se vivió un largo período en el cual imperó una especie de consecuentación, del gobierno hacia la iglesia católica. Como en épocas antiguas, la ley se obedecía, pero se cumplía a medias.

El neoliberal por excelencia, Carlos Salinas, impulsó reformas que daban vuelta al reloj de la historia nacional, aún cuando conservó límites sobre: a) educación pública laica, b) no intervención del clero en asuntos políticos, y c) imposibilidad de acumulación de bienes temporales en sus manos y en las de las Iglesias o agrupaciones religiosas. Solo el Partido Popular Socialista se opuso. De esa reforma, surgió una nueva figura de derecho público, con un régimen específico,  las llamadas “asociaciones religiosas”; es oportuno aclarar que, la ley no crea instituciones religiosas, únicamente las reconoce, a través de la Secretaría de Gobernación y les otorga la personalidad jurídica propia (que no tenían), quedando dicha Dependencia del Ejecutivo, como autoridad del ramo.

El texto vigente del citado precepto constitucional 130, fue publicado en el Diario Oficial (DOF) de la Federación el 28 de enero de 1992; Las disposiciones constitucionales ahí contenidas, al igual que el artículo 24 y la parte relativa del 27, son reglamentadas por la Ley de Asociaciones Religiosas y Culto Público ( LARCP) publicada en el  DOF el 15 de julio de 1992; Ordenamiento que a su vez es desarrollado por el Reglamento  publicado el 6 de noviembre de 2003.

Dice el Artículo 39 del Reglamento, que son sujetos de las sanciones previstas en la Ley, sin perjuicio de lo dispuesto en otros ordenamientos, las asociaciones religiosas, sus representantes, ministros de culto y asociados. Igualmente las Iglesias y agrupaciones religiosas que no cuenten con el registro constitutivo, así como las personas que lleven a cabo actividades reguladas por la Ley. Lo anterior está ligado al  Artículo 29 de la LARCP, que dice: Constituyen infracciones a la presente ley, por parte de los sujetos a que la misma se refiere: I. Asociarse con fines políticos, así como realizar proselitismo o propaganda de cualquier tipo a favor o en contra de algún candidato, partido o asociación política. Las sanciones (art.32) van desde apercibimiento, multa, clausura, suspensión y hasta cancelación de la asociación religiosa.

Los mensajes que poco antes de las elecciones de junio pasado, expresaron tanto el cardenal emérito de Guadalajara, como el Primado de México y algunos otros, no cabe duda que repercutieron en los votantes y con ello en el resultado de la elección. El pueblo mexicano y aún más el jalisciense, sigue siendo en gran parte muy católico, por lo que es evidente se le pueda influir por ministros del culto, y más por los de alta jerarquía. Como expone el jurista José Luis Soberanes: la práctica religiosa trasciende el ámbito privado de los individuos e incide, en ocasiones de manera muy importante, en la vida social, llegando a influirse mutuamente de manera fundamental.

La denuncia que originó las sanciones que ahora deberá imponer Gobernación, se presentó en junio de 2021, en contra de diversos ministros de culto, derivado de la publicación de videos en redes sociales durante el proceso electoral 2020-2021, mediante los cuales realizaron manifestaciones presuntamente proselitistas en contra de Morena, violentando el principio de separación Iglesia-Estado, así como la veda electoral.

La Sala Regional Especializada declaró existente la infracción atribuida a los ministros,  al considerar que realizaron manifestaciones que impactaron en el proceso electoral federal al pretender influir en el sentido del voto de la ciudadanía. Inconformes con lo anterior, los ministros de culto promovieron medios de impugnación alegando, principalmente, que las expresiones se realizaron en ejercicio de su libertad de expresión y en su carácter de ciudadanos, no como representantes de la Iglesia. Además, sostuvieron que no indujeron al voto y, por ende, no vulneraron el principio de separación Iglesia-Estado.

El asunto llegó al pleno de la Sala Superior del TEF, donde se consideró que: Juan Sandoval Íñiguez y Mario Ángel Flores Ramos vulneraron el principio de separación Iglesia-Estado pues sus expresiones, de manera inequívoca, pretendieron inducir al voto en contra de una opción política y se realizaron a través de redes sociales, es decir, medios de comunicación masiva que trascendieron a la ciudadanía. Por ello se ordenó dar vista a la Secretaría de Gobernación para que, en el ámbito de sus atribuciones, considere lo resuelto en relación con las infracciones que la Sala Regional Especializada hizo de su conocimiento.

Por tanto, se confirmó la violación al principio de separación Iglesia-Estado a cargo del cardenal Juan Sandoval Íñiguez, así como del sacerdote Mario Ángel Flores Ramos (SUP-REP-478/2021 y acumulado).

No cabe duda de que la autoridad competente federal tiene un singular asunto en sus manos; de lo que resuelva sabremos si el principio de la división entre Estado e Iglesia, realmente está vigente o si es letra muerta, en cuyo caso recordaremos lo que Don Quijote dijo a su escudero Sancho: Con la Iglesia hemos topado.

MORENA Y ALIANZAS, ENTRE CONTRAVENCIONES E INCONFORMIDADES.

Por Pedro Vargas Avalos.

El superior objetivo de los partidos políticos es alcanzar el poder, con el fin de aplicar sus principios y cumplir compromisos cuando formen gobierno. Todas las demás metas, por importantes que sean, las sujetan a esos principios sustanciales. De allí que a veces se avisten escenarios como los que ahora contemplamos: institutos antes enemigos, resulta que son “amigos” (como el PAN, PRI y PRD) y forman la incongruente coalición “Va por México”. Por otra parte, la victoriosa “Juntos Haremos Historia”, transformada en 2020 en “Juntos Hacemos Historia”, encabezada por MORENA, ha tenido aliados de chile y picadillo: organismos confesionales como el PES, o logreros como el Verde Ecologista (PVEM) e inexorables como el de los Trabajadores (PT).

La alianza morenista detenta el poder político fundamental, por lo que lógicamente, su principal lucha es conservarlo y en lo posible, incrementarlo sumando entidades federativas: para cristalizar sus ideales instrumentó lo que denomina la Cuarta Transformación, o sencillamente Cuatro T. En cuanto a la oposición, su búsqueda denodada es desbancar a los anteriores, y pugnar por no perder porciones de lo que aún conservan dentro de los ámbitos estatales; su principal defecto hasta ahora es la carencia de programa, inconveniente que todo mundo le echa en cara.

Por separado anotamos al partido Movimiento Ciudadano (MC): es la evolución de Convergencia Democrática (fundado como Agrupación Política en 1996, con registro como partido en 1999) que presidió su fundador Dante Delgado Rannauro -expriísta-  quien se sumó a la “Alianza por México” en 2000 (con el PRD, PT y otros) apoyando al candidato presidencial Cuauhtémoc Cárdenas. En 2002 recortó su nombre a solo “Convergencia”, reeligiendo a su directiva, o sea, a Dante Delgado. En 2005 y 2006, obtuvo sus primeras gubernaturas (Guerrero y Chiapas) en alianzas con otros institutos, como el PRD. Con este formó nueva coalición (Por el Bien de Todos) para apoyar a Andrés Manuel López Obrador, candidato presidencial del PRD y PT en 2006. Luego constituyó distintas uniones, como el FAP (Frente Amplio Progresista) hasta el “Salvemos a México”, que sumó numerosos organismos, entre ellos el del sol azteca, para caminar unidos desde 2009. Por fin en julio de 2011 adoptó su vigente denominación: Movimiento Ciudadano, que hoy por hoy “Coordina” el senador Dante Delgado, virtual dueño de la institución, a la que había coordinado (eufemismo por dirigido) de 2012 a 2018. Los Estados donde participó aliada, fueron 7, y sola, ganó en Jalisco, donde quien realmente triunfó fue el alfarismo. Ahora tiene además Nuevo León, y podemos incluir a la ciudad de Monterrey con su flamante alcalde, el junior heredero del apellido mágico: Luis Donaldo Colosio -Riojas-.

La inquietud de quien sucederá al actual primer mandatario federal, desde el principio del sexenio ha sido motivo de acotaciones, porque para los mexicanos eso es un verdadero entretenimiento, instigado por los comentócratas con domicilio en la capital de la nación, quienes, si antes lo hacían por rutina, ahora, al perder favores, lo asumen como encomienda. Esa ocupación, encontró tierra fértil cuando AMLO mismo adelantó el tiempo de la sucesión, mencionando a varios de sus colaboradores (Claudia Sheinbaum, Marcelo Ebrard, Tatiana Cloutier, Juan Ramón de la Fuente, etc.) como viables candidatos presidenciales: a todos los mexicanos asombró que entre ellos no incluyera al senador Ricardo Monreal Ávila, líder del Senado.

A la par se llevaron a cabo varias encuestas en las Entidades federativas donde habrá elecciones para gobernador este año: Aguascalientes, Durango, Hidalgo, Oaxaca, Quintana Roo y Tamaulipas. Las dos coaliciones y el partido MC, han ido nombrando sus candidatos, generando con tal causa, varias confrontaciones, pues en una y otra alianza, los que no fueron nominados han mostrado su inconformidad y amagan hasta con salirse de su partido. En tal tesitura destacan por lo general miembros de MORENA, y en menor grado, en la otra liga, integrantes del PRI o del PAN.

 En MC los problemas son menores, porque se dedica a recoger aspirantes de cualquier origen. Dice el diario “Contrapeso Ciudadano” del 11 de este mes: “Dante Delgado a la pepena de inconformes de otros partidos”, aunque dicho personaje, veleidoso como ha sido (antes prefería perredistas) escoge panistas, pues 5 de sus 6 aspirantes provienen de las filas blanquiazules: Patricia Flores Elizondo, cercana colaboradora de Felipe Calderón, ya es abanderada naranja en Durango; Dulce Alejandra García Morlán, precandidata al gobierno oaxaqueño; en Aguascalientes, dos expanistas llegaron a la final del MC: Antonio Martín del Campo y Fernando Herrera Ávila, exvocero con Marko Cortés. En Quintana Roo, Marybel Villegas Canché confía en darle una nueva entidad a Movimiento Ciudadano; y hasta al saltimbanqui Francisco Xavier Berganza, dos veces candidato a gobernador por el PAN, luego diputado morenista dimitente, ahora aceptó ser postulado a la gubernatura hidalguense. Solo le resta Tamaulipas, en donde el dueño de MC ya le echó la vista a la morenista inconforme, la ex alcaldesa de Reynosa, Maki Ortiz, antes panista.

En la coalición “Va por México”, también se han dado las confrontaciones, como la sostenida entre el gobernador hidalguense Omar Fayad contra Alejandro Moreno “Alito” -dirigente del partido tricolor-, a quien acusó de haber entregado al PAN la candidatura, siendo la elegida la señora Carolina Viggiano, secretaria del CEN priísta, pero primero postulada por el panismo. Como respuesta, “Alito” le dijo al “gober” Fayad, que gobernaba para que Hidalgo fuera para MORENA, por lo que no se le tomó en cuenta para la designación. Ahora ya fumaron la pipa de la paz y se toman fotos juntos, campantes cual si no hubiese pasado nada. Sin embargo, gracias a una ductilidad increíble, los panistas postularon otros dos candidatos, de 4 en que acordaron ir unidos los de “Va por México”: la antedicha candidatura de Hidalgo (priísta, como ya dijimos) más Tamaulipas y Aguascalientes, donde aseguran que tienen mayorías para ganar; pendiente quedó Durango. En vilo están Oaxaca y Quintana Roo, donde Laura Fernández Piña, dejó al Verde para que la postulara el PRD, que, si no logra el respaldo de sus otros colegas, está destinado a perder. En Oaxaca, la pesca está difícil porque la senadora Susana Harp, perdedora interna en Morena, declaró que “Ella no traiciona”, por lo que no oye cantos de sirena. De allí que ya se constituyeron dos ligas para competir contra el abanderado de Morena (senador Salomón Jara), el favorito para ganar la elección: esas alianzas son “Con Rumbo y Estabilidad por Oaxaca” (Creo), convenida por el alicaído PRD y el PAN; la otra se denomina “Juntos Hacemos Más”, compuesta por el PRI, el Verde Ecologista de México (PVEM) y Nueva Alianza (Panal).

En cuanto a MORENA, que se cree ganará 4 o 5 gubernaturas de las 6 que estarán en juego, por medio de encuestas muy sigilosas, ya nominó de entre 156 suspirantes, a sus seis abanderados: Por Aguascalientes, Nora Ruvalcaba: en Durango, Marina Vitela; Mara Lezama competirá en Quintana Roo; y Salomón Jara irá por Oaxaca. En Hidalgo y Tamaulipas se eligió a Julio Menchaca y Américo Villareal, respectivamente. Las inconformidades han estado presentes, según anotamos anteriormente, pero las más críticas y que ya impugnaron el proceso ante el Tribunal Electoral, son Durango, Oaxaca, Tamaulipas y Quintana Roo. Los argumentos de los perdidosos en general son de que las encuestas fueron amañadas, y que la solución para escoger vencedores, fue cupular. No se descarta que algunos de esos aspirantes frustrados, acepten ofertas de partidos distintos. 

Ahora bien, el otro reto electoral, de mayor escala que los de este año, es el de la elección federal de 2024. A simple vista, se ve distante, pero el mismísimo presidente de la republica abrió la competición, cuando el año pasado (muy anticipadamente, se asegura) puso sobre la mesa una lista de presuntos aspirantes, llamando la atención de que entre ellos no figurara Ricardo Monreal, notoria figura morenista y líder del Senado. Interrogado este zacatecano, exculpó a López Obrador, diciendo que su enumeración consideró el respeto a los demás poderes de la Unión, y él pertenece al legislativo.

Como es evidente, cada día que pasa se aviva el ambiente en torno a la sucesión de AMLO. Y hasta la fecha, lo claro es que los nombres que se barajan, son de MORENA, y en cuanto a la oposición todo son conjeturas e inferencias: recientemente el líder del PRI se dijo listo para participar, ante la incredulidad de los mexicanos. Por el panismo, sigue en su macho el desmerecido Ricardo Anaya, y a veces se mencionan sujetos como Claudio X. González jr., o hasta a Lorenzo Córdova, el del INE: pero todo son desazonadas suposiciones. Por su lado, MC sigue en su idea de no aliarse, y que con sus políticos mas destacados tiene suficiente para competir; estos no pasan de los gobernadores de Jalisco, de Nuevo León y el alcalde de Monterrey.

Según el primer mandatario nacional, la sucesión arrancó ya, porque, a diferencia del pasado, “ahora no habrá tapadismo” y los aspirantes deben estar a la vista de todos. El excluido, Ricardo Monreal, afirma que “Se vive una sucesión adelantada…sucesión precipitada, fuera de toda lógica institucional, y muy muy alejada de cualquier ortodoxia; para mí no fue oportuna, correcta ni conveniente, incluso no lo creí necesario”. (entrevista de Roberto Zamarripa, Reforma, 9.ene.22). Estas consideraciones ponen de manifiesto la confrontación entre el Presidente y el dirigente del Senado, lo cual puede devenir en lamentable fractura para el partido en el poder.

El adalid real de MORENA (AMLO), secunda la idea de que las encuestas determinen quien será el representante de su partido en esa contienda de 2024, subrayando que él apoyará a quien salga adelante en esos sondeos. En cambio, Monreal plantea como mejor método el de elecciones primarias, propuesta que al parecer no tiene mucha aceptación en las filas morenistas, ni en el movimiento lopezobradorista, que es más amplio. Esta confrontación aleja más al Senador, de su meta de ser candidato; empero, porfiado como es, alega que ganará la postulación.

Pedro Miguel, intelectual morenista importante, declaró: El Presidente ha sido claro, en decir que él no es el factor decisivo de quien será candidato. Que apoyará a quien las encuestas digan es el más popular, y si Monreal como dice, es el más popular, pues no hay problema, él sería el candidato. (Entrevista con Rubén Luengas, En contexto, 9-ene-22).  

Según Juan Ignacio Zavala -panista- la actitud de Monreal es medida, al salir a declarar en medios hostiles a la Cuatro T., con lo cual persevera en su empeño. Pero a la vez lo acerca más al descarte, si quien puede (el mandatario), decide quitarlo de guía senatorial. Según Héctor Aguilar Camín, el juego de Monreal es ambiguo y hace valer sus buenas relaciones con diversos partidos, además de que en los comicios de junio hizo sentir su poder, factor por el que hubo fracasos morenistas. Finalmente, dice este intelectual orgánico, estamos en el juego democrático, y se debe tener en cuenta -para el caso de que Claudia Sheinbaum y Marcelo Ebrard, se frustren- otros posibles jugadores de la sucesión, como el Secretario de Gobernación, al embajador en la ONU y hasta al coordinador de asesores de López Obrador, Lázaro Cárdenas Batel. (Botepronto, Milenio, 13-oct-2021). 

Otro frente de confrontación lo ilustra la declaración de Monreal a Roberto Zamarripa, sobre que, si se da opción a los radicales, estos acabarán al país.  En su libro “La Larga Travesía” (repaso de la campaña presidencial de 2012), propone saber recorrerse de la izquierda al centro, para poder ganar; por ello, afirma que “Yo no estoy de acuerdo con radicalismos”,  agregando, “…concuerdo más con la democracia social que con los extremismos de la izquierda. El presidente sabe que yo no soy de ninguna extrema posición, ni de derecha ni de izquierda”. (Reforma, 9 ene 22). Pedro Miguel opinó al respecto: ¿No habrá país?  suena muy apocalíptico. (En contexto, 9-ene-22).  AMLO abundó que ser radical, es profesar de raíz los principios de izquierda, y reiteró en una mañanera: que reprueba lo de correrse al centro, buscar quedar bien con todos; se debe ser auténtico, estar anclados en nuestros principios, no zigzaguear, pronunciándose siempre por los pobres y la justicia, para tener simpatía de los de abajo, de la zona lúcida y humana de la clase media y alta, con lo que es suficiente para derrotar a los reaccionarios.

A propósito de lo anterior, dice Alejandro Páez: Cada que replica Monreal, saca ventajas: la pasada vez en 2018, al perder la candidatura a la Ciudad De México, salió ganando senaduría y liderazgo de la Cámara Alta. Total, siempre tiene a donde ir, aunque sostiene: “Estoy en Morena, sigo en Morena, porque en Morena hay muchas visiones, hay quienes coinciden conmigo, hay quienes no, que han viciado este proceso anticipado de la sucesión …” (Sin Embargo, 10-ene-22). Y a Zamarripa le expresó que “estoy viviendo una etapa difícil en mi vida pública, en mi vida política, una etapa que a nadie se la deseo”. 

Hace unos días, Monreal, en conjunto a Dante Delgado, se querelló contra Cuitláhuac García, ejecutivo veracruzano, por la detención del cercano colaborador en el Senado, el emecista José Manuel del Río, acusado de homicidio, con lo cual abrió otra confrontación intramorenista: Monreal acusa al juez del caso como “de consigna”, y a la fiscalía estatal como servidora del ejecutivo, calificando al asunto de absurdo, ilegal, “de risa” en cuanto a lo jurídico, porque a él le consta lo recto del detenido. López Obrador, advirtió que esas rencillas dañan a Morena y a la Cuatro T, y que el gobernador es muy recto.

 Así las cosas, el senador morenista está confrontado con Cuitláhuac García, con Claudia Sheinbaum, con varios senadores que ya no lo siguen como líder, con muchísimos lopezobradoristas, y sobre ello, contesta: que fue fundador de Morena, que es independiente de criterio y de opinión, que tiene diferencias con quienes abusan del poder porque cometen los excesos que cuestiona Morena. Dice no tener rencillas, sino diversos puntos de vista. Que él lucha por que las ideas predominen sobre “este proceso de aniquilamiento que pretenden instaurar las facciones”.  Por ello, “voy a luchar en el interior del partido, aunque no en igualdad de circunstancias, porque no las hay, no hay piso parejo”: pero no es mi intención confrontarme con el mandatario, porque “creo que la aportación que él ha hecho a este capítulo de la vida nacional, es sorprendente y es admirable”, es un demócrata, lo conozco muy bien luego de luchar 24 años juntos; es muy fuerte, “goza de apoyos no solo en Morena, sino con aliados y fuerzas independientes, por lo que, lo que haga por uno u otro de los aspirantes, es muy pesado: a uno se le apapacha, a otro se le reconoce y a uno más se le ignora”, por lo que la expresión de la militancia es un reflejo de esa conducta; pero “yo estoy muy tranquilo, he jugado las reglas de la política toda mi vida, nunca he corrido con la ventaja de la nomenclatura, y no reclamo trato diferente, ni patrocinio ajeno, solo quiero que se democratice la decisión del partido en el momento de tomarla”. Por ello ahora no debe haber confrontación irracional, “estamos a tiempo de evitar que la pugna y purga sean características de Morena”, eso a nadie le conviene.

Por lo supra escrito, muchos opinadores estiman que la única boleta para que Monreal sea candidato, no es por Morena sino en la oposición. Según Alejandro Páez,  Ricardo “no es del PRI, pero no lo descarten; no es de MC, pero tiene un pie ahí; no es del PRD, pero lo tienen de aliado; no es del PT, pero el PT ha sido de él;  es de Morena, pero en Morena se entiende por sus propios mensajes que no lo es tanto: ahora está en el reniega y vencerás, caminando hacia el ganar perdiendo, sino es que se revienta la liga…”. A eso de abanderar otro partido, el senador contestó pronto: “Espero que no, ya pasó una historia con un presidente de la república”. Finalmente, en cuanto a su relación con el primer magistrado, trata de poner punto final con el siguiente mensaje difundido en sus redes sociales: “Hace casi un cuarto de siglo inicié una larga travesía de lucha política con el Lic. Andrés Manuel López Obrador para transformar las instituciones de la nación. Fue la mejor decisión; nunca confrontaré al presidente ni me alejaré de mis ideales por un mejor país. ¡Viva México!”. 

La Puerta del Barro

Leoel Michel Velasco

De pronto te encuentras coronado por elevados cerros y algunas verdes bardas de órganos pitayeros delimitando propiedades e impidiendo la entrada o salida de animales domesticados, ojalá volvieran a organizarse para ser una comunidad única en el mundo con sus linderos de órganos Pitayeros, como antaño; su naturaleza lo reclama. Vivir en puerta es vivir en contacto pleno con ella, es amar la verde quietud, valorar el fresco oxigeno, escuchar entre cercano y lejano el aullido de coyotes, buscar la luz de las estrellas y, escucharte; cavilar, despojarte de egoísmos, desear y pensar en el otro y soñar mil sueños…

Como, llegar a Puerta de Barro, en sombreada verde ciclovía, para tomar un merecido descanso, en una comunidad espiritual de ensueños, donde un gran porcentaje de sus casas cumplen esa función en vacaciones y fines de semana, en algunas otras sus moradores son estudiantes del Instituto Tecnológico Superior de El Grullo.

La Puerta, es cuidada por una joven mujer de rizados cabellos que poco se deja ver.