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Hecho Por unas Adolescentes de Secundaria

Leonel Michel Velasco

Hazañas que difícilmente podrán replicarse.

Cuando se podrá volver a esta normalidad, clases presenciales, socialización, liderazgos, participaciones, competiciones, emociones, entre otras. ¿cómo será el desarrollo de potencialidades… ante esta pronosticada e impuesta realidad diecinueve, ya que no todo es tecnología y ¿la docencia ?

De prolongarse COVID ¿Cómo afectara a las nuevas generaciones?, ¿ El autismo pasara a ser la afección de moda?, ¿Cómo afectará al deporte en general?; las artes, la economía, el ocio, la política, religiones, salud, la psique, el amor, en sí, toda actividad humana?

El coco de los kinestésicos necesitados de apapacho, de contacto. Que por hoy solo se permite visual; sin olfato, ni gusto, solo falta perder el tacto y nulificar las relaciones genitales. Para no multiplicar solo restar.

…Y dividir. Hea Hea Hu Hu

Urge conocer más a ese tal virus y conocernos más para unir sumar y vencer.

Muy conveniente seria trabajar interdiciplinadamente en el desarrollo de acciones preventivas y en su caso readaptativas, para enfrentar lo más humanamente posible los estragos y secuelas, perdidas: emotivas y materiales, con largos procesos de luto y/o economía colapsada, consecuencia de guerra virulenta.

Un equipo conformado por: Antropólogos, Sociólogos, Psicólogos sociales y demás especialidades, maestros de educación en general , Trabajadores Sociales, Médicos, Abogados, Promotores Sociales, virologos…

Dedicado todo esfuerzo a las generaciones de niños y jóvenes.

Crecen Los Contagios

Rodolfo Gonzáles Figueroa.

En el Municipio ya hay más casos. Y no sólo en el Municipio, también en la Región Costa Sur y Sierra de Amula. Y más, todo el Sur de Jalisco está contagiándose sin que, al parecer, halla modo de detener la propagación. 

Las autoridades no han hecho nada para detener este virus.

¿No sabías?

Debemos enterarnos todas y todos.

Cada vez es mayor el número de contagios. Y, al parecer, puede que se propague exponencialmente si las familias siguen abriendo su rigidez, cambiando los hábitos y dando mayor atención a lo esencial. 

Es claro cómo permanece la tendencia al alza. Por todos lados muchas personas siguen estando en contacto directo y sin cubrirse la boca, por lo que el tema crece no sólo en el país, sino, en el mundo.

El indicador es permanente, la curva no se aplana, los datos existentes no muestran ni la mitad de la realidad. Hay muchos casos escondidos, relegados, aislados que no entran en las bases de datos de quienes se encargan de medir el número de contagios.

Muchas personas no avisan y no consultan. No atienden las medidas oficiales ni mucho menos los mandatos, quizá por eso siguen reproduciéndose los huertos, chicos y grandes, medianos, en botes, en llantas o en el patio. Huertos familiares, comunitarios, escolares, pedagógicos o terapéuticos. Horizontales, verticales, circulares o cuadrados.

Donde nace un huerto se crea un foco de infección comunitaria muy saludable, es irreversible y por fortuna, no tiene control.

Mujeres en grupo, en colectivo deciden hacer otra agricultura, chiquita y a pequeña escala, pero más diversa que los monocultivos agroindustriales. Chiquita, pero más rica en conocimientos, memoria y cultura que la mecánica y asesina agroindustria.

Las niñas y niños, también se contagian, y mucho. En el Huerto y en la Milpa aprenden otras pedagogías que no estresan, sino, que liberan. Qué no enferman, sino, que sanan.

Contagios descontrolados y desmedidos que motivan la soberanía alimentaria, curvas que ascienden sin aplanarse. 

Relieves, geografías y edafologías productivas y agroecológicas que transmiten diversidad infectando a la normalidad monocultural y homogénea. 

Siguen regándose, diseminándose, reproduciéndose afortunadamente sin control, las iniciativas de autonomía y autogestión que invitan a juntarnos, a religarnos, a reconectarnos con la tierra, la biodiversidad y el territorio tan olvidado.

Eso que llaman pandemia que mata y enferma, también es origen de otra realidad que nos hace renacer y nos cura. La agricultura en nuestras manos. ¿Agriculturademia?

Ahí dónde nace una milpa entre el concreto o en el traspatio se abre una grieta que, junto con eso que llaman pandemia, terminará por fracturar y derribar a un sistema que de por sí, venía ya cayendo solito y sin vértigo.

La independencia alimentaria está trayendo consigo una ruptura al modelo de consumo, acaparamiento y despojo del mercado dominante. La soberanía alimentaria está curando a los pueblos, a los suelos y a los cielos. Los virus del capital sucumben ante el coctel microbiológico de los cuerpos agroecológicos que antes de aislarse salen al sol y a la tierra y esparcen con mucha energía y amor semillas libres para transformar sociedades.

Huertos y Milpas diversas nacen aquí y allá. 

Sal y contágiate junto con tu familia y tus seres queridos, la principal medida sanitaria es recuperar la capacidad de creatividad y transformación de tu espacio, tierra, terruño o territorio.

Sí, cada vez hay más contagios.

Sembrar una semilla en la tierra o regar plantitas, son unos de los principales síntomas. Si sientes ganas de cosechar tu propia zanahoria o algún otro alimento, felicidades, ya estás contagiad@.

Nuestra actualidad Virulenta

Leonel Michel Velasco

La evolución humana es un esfuerzo continuo del hombre para adaptarse a la naturaleza, que evoluciona a su vez. Para ello necesita conocer la realidad ambiente y prever el sentido de las propias adaptaciones.

JOSÉ INGENIEROS 

…Y no nos queda de otra, que prever el sentido de nuestras adaptaciones ante el natural o creado COVID 19; éste virus de transmisión entre humanos, llego para quedarse, más nos valdría irnos adaptando. 

El agua al cuello

Siendo ésta una guerra perdida; para quienes no lo creían ya es una realidad en nuestras regiones; el tener conocidos o familiares infectados por el virus, por lo que, me he hecho los siguientes cuestionamientos: ¿He previsto los medicamentos indicados para el combate de la epidemia?, ¿Mi sistema inmune es fuerte o débil?, ¿De acuerdo a mi edad y salud, qué tan vulnerable soy?, ¿No seré asintomático?, ¿Creo en las vacunas y las pruebas?, ¿Creo en la medicina casera?,  ¿Asisto o me abstengo de cualquier tipo de reunión (fiestas, conciertos, reuniones sociales, deportivas, culturales o religiosas (aún reunidos en nombre del Señor)?, ¿Utilizo las medidas preventivas recomendadas? (aseo de manos, cubre bocas, distancia social, mantenerse alcalino, no tocarse la cara y uso del gel), y me pregunto ¿no abra algún olor que repudie el virus, como el que repudia el mosquito hembra portadora de virus?, ¿La higiene es necesaria, si sí entonces los indigentes son los más expuestos, o sus defensas son altas o es el distanciamiento social por repudio, el que los defiende?, ¿En caso de afección me internaría en algún hospital o me quedarías en casa? Y finalmente ¿Qué tan dispuesto estoy para adaptarme a esta nueva realidad del COVID 19?. Ya que a la fecha, no se ha logrado desarrollar una vacuna eficiente para el virus del sida, ¿Cuándo tendremos en nuestro medio la del COVID 19?.

Aguas el dengue esta en casa

Zancuda virulenta en casa

¿Que será más conveniente quedarse en casa, al acecho de la zancuda (mosquito hembra infectada) (mosquito Aedes aegypti) portadores del dengue, entre otras infecciones víricas como: el chikungunya, la fiebre amarilla, la infección por el virus de Zikao y el dengue hemorrágico; donde también hay portadores asintomáticos y suele ser mortal, o. Salir a torear al COVID 19 y, como ancestral guerrero, salir de casería para proveer el pan nuestro de cada día?…

Si te quedas en casa, ármate de tu raqueta electrocutante, ingiere citronela ayuda a relajar los músculos del estómago, alivia los espasmos y contribuye a frenar la infección bacteriana y, como aceite por su olor aleja a los mosquitos siendo un insecticida natural, previene las picaduras y las desinfecta. 

Del COVID 19 aún ignoramos mucho y siendo el humano el que lo trasmite, resulta de mayor cuidado, de morir infectado sin rituales presenciales ni acompañamiento, la cremación es segura, no hay raquetas electrocutantes. 

No pudimos con los enormes menos con los invisibles, que continúan evolucionando, natural o artificialmente. Adaptarse a la naturaleza tiene menos consecuencias que alterarla, ello es suicida respetémosla. Y por favor dejen de contaminar nuestro aire con sus quemazones de caña, es posible y lo saben. No alteremos a la naturaleza; sí desaparecieron los dinosaurios que dominaban la tierra. Y quizás solo para darnos paso a los humanos… a Dios Gracias.

Sistemas de Salud en Crisis

Pedro Vargas Avalos

La salud es la suprema ley del pueblo, afirmó el benefactor de Guadalajara Fr. Antonio Alcalde. Y a los dichos aparejó los hechos, fortaleciendo los hospitales y ayudando a los enfermos hasta el extremo. La lección tal parece que los políticos no la aprendieron. Ni muchos médicos.

Leemos en un periódico tapatío lo siguiente: “Por la saturación en sector público, alza en consultorios privados”. Interrogada una persona sobre porqué siendo derechohabiente del Seguro Social, acudió al servicio particular, respondió: “El servicio del IMSS siempre está saturado…” y como tiene que trabajar, pues recurre al médico privado. Y con la pandemia del Corona virus, agrega dicha persona, “en el Seguro Social ya no me quisieron atender, me dijeron que por esto del COVID-19 ni los análisis que me iban a hacer…me dijeron que no se podían arriesgar.”(El Informador, 13 agosto 2020.)

Casos como el anterior se suceden a cada instante. Me consta de una joven que habiendo

contraído el coronavirus, en el Seguro le dijeron que ni para que gastar en la prueba, pues era evidente que lo padecía; le extendieron una incapacidad, pero en el centro de trabajo que es de servicios médicos, le advirtieron que debería firmar una carta declarando que el padecimiento no lo había contraído allí. ¡Vaya de sentido humanitario! Con razón muchos de esos dizque seguidores de Hipócrates, confundieron su juramento y lo hicieron de hipócritas.

Pero el asunto no para solo en el IMSS, sino que abarca a todos los sistemas de salud, incluyendo al ISSTE y al Estado. Como ejemplo muy elocuente tenemos el caso del Instituto de Pensiones del Estado, donde tal parece que hasta dan gracias a Esculapio por haber mandado la pandemia, pues con ese motivo cancelaron casi todas las operaciones. Si se pregunta a una enfermera-secretaria de alguna clínica de tal sistema estatal, con lacónicas palabras solo contestan: ¡Están canceladas!.

Y si no se queda uno contento con la respuesta, y les dice que entonces se podría morir un

paciente por no intervenirlo quirúrgicamente, enmiendan lo expresado y dicen: “Bueno, si se trata de cáncer, síncope cardiaco, o algo parecido, si se atiende.” La conclusión es que no debemos enfermar ligeramente, sino de gravísimos males que pongan en peligro la existencia, porque entonces sí hay la esperanza de que se brinde atención adecuada.

Ahora bien, eso es en cuanto a padecimientos, otra historia es el surtir las recetas. Como es constante que la farmacia de IPEJAL carece de medicamentos, -igual que en el IMSS o ISSTE- hay que estar alertas para cuando los surten, porque se terminan en dos por tres. Y si se va con el doctor de urgencias, porque no es horario del médico familiar (horario que se estrecha para surtir lo prescrito) luego se excusa, ya que él solo expide recetas de lo urgente y no de lo de control (creo que así llaman cuando solo se acude por medicinas periódicamente). Claro que cada unidad médica tiene funcionarios para resolver la problemática de la clínica, sin embargo suelen como buenos burócratas no estar prestos para atender pacientes quejosos, y si lo hacen tienen a la mano muchas evasivas para no acceder a lo que se les pide. Puede optarse por acudir con los superiores, pero entonces la cuestión es más dificultosa, pues el mero director casi resulta imposible verlo y sus segundos, seguido están en juntas, llegan tarde y se abruman con el cúmulo de asuntos que deben despachar, por lo que si el paciente carece del aguante de Job, no será posible que se le reciba, aunque sea para escuchar su queja, lo cual en caso de que se haga el milagro, nada garantiza que se le resuelva su solicitud.

Recordamos que a principios de este año, el gobernador dio su palabra que a partir de unos días más, no volverían a faltar los medicamentos. Pero los señores del IPEJAL no tienen modo de cumplir ese ofrecimiento, o de plano no quieren hacerlo, sin importarles que el “gober” quede mal, y mucho menos que los derechohabientes sufran más de la cuenta.

Y por hoy mejor ya no hablemos de los pensionados y la desatención que reciben, lo pésimo de la ley que rige a la institución, las exageradas pensiones VIPs que son impúdicas y exhiben al sistema y a quienes maquinaron para lograrlas, y etc,.etc.

¿Y el derecho constitucional a la salud? ¿Y la promesa presidencial de que tendríamos los

mexicanos servicios médicos como los europeos? ¿Y que en tratándose de medicinas, quedarían en desuso los cuadros básicos para recetar las mejores? Hasta la fecha, los sistemas de salud en crisis y las acciones para resolverla, son pura ilusión.

Por lo anterior, en tratándose de atención en los servicios de salud, tanto en Jalisco como en México, vale la pena recordar los versos del ilustre Calderón de la Barca: “Qué es la vida?/ Una ilusión/…/y el mayor bien es pequeño;/que toda la vida es sueño,/ y los sueños, sueños son.”