Perder identidad es morir

Leonel Michel Velasco  

La libertad en la vida social debe dar a todo hombre la posibilidad efectiva no sólo de cubrir las necesidades de su existencia, sino la posibilidad de manifestar sus energías creadoras y de realizar su vocación.

Nicolás Berdiaeff

En nuestro modo de vida la música, el cooperativismo, la medicina naturista y la religiosidad Mariana; son vocaciones que en mayor o menor grado nos han dado identidad como grullenses y, han mejorado la calidad de vida en el municipio y la región ¡cuidémoslas!, perderlas redundaría en grandes perjuicios; alguno de sus moradores solo utilizan dichos servicios por conveniencia personal.

V.g. una vocación perdida de los grullenses sin duda alguna es lo de feraces; gracias al monocultivo de la caña por más de cuarenta años; pues ya no se producen diversidad de frutos en abundancia, las tierras han perdido su fertilidad, solo son fecundas primeramente gracias a la abundante agua del valle y, desgraciadamente al uso cada vez mayor de sustancias químicas, como los pesticidas, herbicidas y/o plaguicidas (no olvidemos a los infectados e internacionales niños del Mentidero), así como la quema de la caña, todo lo anterior (es peor que el Coronavirus), aparte de destruir nuestro ecosistema, la proliferación del cáncer es cada vez mayor en nuestro terruño que en otras entidades (nuestras autoridades debieran multar a todo el que queme la caña). Así que lo FERAZ, es historia solo quedo representado en nuestro escudo, mismo que habrá que reconsiderar (Salve FERAZ Valle) a no ser que luchemos por volver hacer FERACES.

¿Que nos resta por hacer?, primeramente cuidar, conservar y fortalecer nuestras vocaciones y con ellas restablecer con firmeza a nuestra vocación perdida o minimizar sus efectos v.g. en congruencia con el cooperativismo: No otorgar créditos destinados al monocultivo, Si a los que utilicen insumos naturales propugnando la agricultura orgánica, consumir y comercializar solo productos orgánicos y, tener ¡cuidado! En no hacer vida los valores y principios cooperativos, apartarse o desdeñarlos, sería tanto como sucumbir. Ya que el Cooperativismo debe ser un sistema de vida insertado en un proceso educativo (en este caso concretizando a nuestros agricultores), que brinde la posibilidad de ser mejores personas, tener el espíritu de la cooperación, la solidaridad y la transparencia, es lo fundamental. Aunque nuestras cooperativas son empresas, como cooperativistas, socios y/o directivos somos un espíritu de encuentro en una comunidad organizada, con un cooperativismo al 100% no debemos ser empresarios ni dueños o condueños, solo una comunidad organizada prestándonos un servicio.

En congruencia con el naturismo, adoptarlo como un sistema de vida, practicar más la medicina preventiva que la correctiva, producir y consumir solo productos naturales, no contaminar nuestro habitad que nuestra casa libre de contaminantes auditivos, visuales y orgánicos, químicos y humos de todo tipo, ejercitarse por las tardes cuando más oxigeno hay, antes de que el sol se oculte, apoyar a nuestro cuerpo a la regulación térmica con compresas frías, estimular a la piel a que expulse toxinas, alimentarse sanamente con digestiones livianas, acostarse temprano, meditar, en fin todo un sistema de vida sana.   

Escuela de música

Una de las vocaciones con aproximadamente un centenario de vida es la música y así lo ha entendido la U de  G un ¡viva! Por ello. Y lo de religiosidad Mariana data del antiguo nombres de esta población Santa María de Guadalupe de El Grullo. 

Conoces lo que tu vocación pesa en ti. Y si la traicionas, es a ti a quien desfiguras; pero sabes que tu verdad se hará lentamente, porque es nacimiento de árbol y no hallazgo de una fórmula. «Ciudadela» (1948)

Antoine De Saint-Exupéry. 

No concibo mi vida más que como un encadenamiento de muertes sucesivas. Arrastro tras de mí los cadáveres de todas mis ilustraciones, de todas mis vocaciones perdidas.

Julio Ramón Ribeyro.