“La familia y el dinero”

foto familiarCarmen Beltrán Baeza

 El dinero es un gran siervo pero un terrible amo. Cuando lo amamos y buscamos, llega a ser nuestro amo. Pero cuando sabemos usarlo bien y para las cosas buenas, es nuestro siervo útil y es una bendición. ¿Cuál de los dos es el dinero en tu familia?

Si tú sientes mucho afán por las cosas materiales, por buenas y necesarias que sean, entonces el dinero manda en tu vida. Algo que yo he observado en los que están afanados por el dinero, es que se quejan y lloran por las cosas que no tienen y no ven cuántas cosas Dios les ha dado… ¡Un espíritu de alabanza y gratitud al Señor  vence esa preocupación¡.

Cuando pensamos que no podemos dar, el dinero nos está mandando. Cuando estamos preocupados por cosas materiales, nunca vamos a tener “suficiente” dinero para compartir, pues, siempre estamos adquiriendo cosas y más cosas y aún más cosas. ¿Cómo puede el hombre que no tiene dinero para dar, comprar cosas para sí mismo?.

El amor al dinero es la raíz de todos los males en nuestro mundo  ¿Te parece exagerado?.. Observa tu mundo.

¿Por qué hay políticos corruptos?- Por amor al dinero.-

 ¿Por qué hay inmoralidad de toda clase?- Por el amor al dinero-.

¿Por qué hay desorden, robos, homicidios, narcotráfico, etc.?- Por amor al dinero-.

 Basta con observar las noticias de todos los días para ver cómo el amor al dinero se encuentra por todas partes y a todos contagia. La avaricia es el amor al dinero. Sobran ejemplos de males causados por el amor al dinero en la Biblia, en la literatura, en el cine, en nuestra vida diaria.

¿Quién manda en tu vida?… Tú o el dinero?.Depende de a quién amas más, al dinero o a ti mismo. Nuestros padres tienen que tomar tiempo para enseñarnos cuáles son nuestros valores en la vida, con  palabras y con  hechos.

Nosotros los jóvenes queremos tener vidas libres de los afanes y las preocupaciones por las  cosas materiales; vidas llenas paz, de tranquilidad y estabilidad.

El dinero siempre ha sido considerado como “lo que vale una persona”; ¡eso no puede seguir así!… Una persona vale por lo que es, no por lo que tiene.

Las personas con esa mentalidad están erróneas. Para eso nos estamos preparando nosotras, para hacer al mundo cambiar y aunque a veces pensemos que solamente somos unas cuantas, hay que ser optimistas.

Si tus padres no te pueden dar un coche del año, no tienes por qué enojarte, ni mucho menos exigirles; ellos están dándote lo mejor y en lugar de reprochárselos, hay que aceptarlo como lo que te hace ser feliz.

En la vida el dinero no lo es todo; te ayuda a vivir mejor, pero no te hace valer ni más, ni menos. Es cierto que por causa del dinero se han ido separando muchas familias que, a falta de este se sienten hundidos en la sociedad y todos se culpan a todos y al final, todos quedan peleados y casi sin querer volverse a ver en la vida.

En lugar de preocuparnos por dinero, deberíamos preocuparnos por mantener unida a nuestra familia, ayudar en lo que se pueda y no exigirles tanto a nuestros padres, sino aceptarles lo que nos den con una sonrisa en la boca y teniendo en cuenta que lo que nos dan, es porque nos quieren mucho e intentan  convertirnos en unas personas de bien y que se preocupen de salvar a nuestro mundo de el problema más grande y significativo… el egoísmo.